martes

Sponji reggae

Una vez en la primaria me hicieron firmar el libro de disciplina por algo que hice fuera del colegio, después de haber asistido a clases. El culpable fue el profesor de Carpintería. Me vio tirando alguna que otra piedrilla, algo así. Que injusticia.
A los días lo firmé de nuevo, porque la Directora me vio mojándome el pelo. Fue hasta la clase de Carpintería (Que casualidad) y me convocó a su oficina donde hizo que firme. "Porque corrés riesgo de resfriarte" Que injusticia II.
¿Qué onda?
Está bien que firmaba bastante seguido, peero buee, eso era ensañamiento contra un pobre nenito indefenso..
Aunque la vez que disfruté más de una firma fue cuando inflé una cajita de jugo Baggio y la exploté en medio de una prueba. Por como se asustaron, definitivamente fue algo que valió la pena. En especial por la cara del que fuese en ese entonces, mi profesor. "El cabeza de fósforo" (Aún recuerdo su apodo)
Bueno me acordaba el otro día y reía.